El rugby es un deporte duro. La gente que lo juega no tiene miedo de ser golpeado, de recibir un golpe, de arriesgarse a una lesión en la búsqueda de la victoria. Sin embargo, los mejores jugadores son aquellos que pueden durar todo el juego, que pueden mantener la velocidad y el poder de sus jugadas y abrumar a sus oponentes más débiles. ¿Cómo puedes lograr ese nivel de fuerza, poder y velocidad? ¿Cómo puedes armar un régimen de entrenamiento que te deje listo para dominar tu próximo partido de rugby? En el artículo de hoy vamos a echar un vistazo a los componentes de un régimen ganador que te dejará dominar en el campo cuando llegue el momento de jugar.

Lo primero en lo que debe concentrarse es en su resistencia. Los jugadores de rugby deben poder mantener altas velocidades durante largos períodos de tiempo y deben poder cruzar y cruzar el campo una y otra vez sin perder el viento. Con este fin, debe combinar una combinación de carrera de larga distancia con distancias más cortas realizadas en intervalos. Al menos una o dos veces a la semana, debe tratar de cubrir una distancia más larga, siempre enfocándose en poder aprobar el examen de voz mientras lo hace, y luego, en otros dos días, debe hacer un entrenamiento por intervalos.

El entrenamiento por intervalos es donde usted prueba y empuja su cuerpo haciendo ejercicios de alta intensidad durante períodos de tiempo más cortos con descansos mínimos en el medio. Para el rugby, esto podría implicar correr tres series de ocho minutos con descansos de tres minutos, donde vas tan duro como puedas durante esos ocho minutos, sabiendo que tendrás un descanso en el medio. Esto también funciona para sprints, y debes variar las distancias y combinaciones para desarrollar la mayor variedad de velocidad y resistencia. Este es un elemento clave para ponerse en buena forma para el juego.

Luego tienes que trabajar en tu fuerza, y eso significa ir al gimnasio. No pierdas tu tiempo con máquinas de aislamiento o juguetes elegantes. Solo agarra una barra y haz un trabajo serio. Su rutina de ejercicios en el gimnasio debe incluir movimientos compuestos básicos y duros como sentadillas, peso muerto, press de hombros, press de banca, pull ups y limpieza y tirones. Debes concentrarte en la potencia, en la velocidad y forma explosivas, y esto se traducirá directamente en el campo de rugby. ¡La mejor de las suertes!