La tecnología de la información se utiliza ahora en todos los ámbitos de la vida. Las organizaciones de servicios de seguros se encuentran entre los mayores usuarios de TI. Es un desafío para las compañías de seguros mantener actualizada su mano de obra en conocimientos de TI para que puedan hacer un mejor uso de la implementación de TI. A menudo se ve que se gasta una gran cantidad de dinero en la implementación de una tecnología y, posteriormente, se descubre que esta no era la que se necesitaba o que seguía infrautilizada.

Si intentamos categorizar el uso de la tecnología de la información en el servicio de seguros, podemos poner varios usos en las siguientes tres categorías: gestión de documentos y conocimientos, automatización del flujo de trabajo y análisis e inteligencia empresarial. Mapeemos estos con algunas de las funciones importantes de seguros como suscripción, diseño de productos, empaque de productos, administración de pólizas, gestión de reclamaciones, gestión de relaciones con el cliente, etc.

Actividades como los riesgos de suscripción y el diseño / empaquetado de productos dependen en gran medida de la gestión del conocimiento, análisis potentes y técnicas de inteligencia empresarial. Todas las organizaciones de seguros deben tener algún software para la gestión del conocimiento y la inteligencia empresarial o, si no es así, deben implementarlos en un futuro próximo. Para aprovechar al máximo las técnicas de gestión del conocimiento y de inteligencia empresarial, los usuarios deben tener conocimientos suficientes sobre cuándo y dónde qué técnica puede ser útil.

Al mismo tiempo, también necesitan conocimientos prácticos suficientes sobre el software / herramienta implementado o por implementar en la organización. Este conocimiento depende del software. Si se cambia el software en el futuro, las pantallas y las opciones cambiarán y los usuarios deberán volver a capacitarse en el nuevo software. Sin embargo, el primer conjunto de conocimientos sobre las técnicas en sí no depende del software. Este conocimiento se sigue enriqueciendo con el uso y la experiencia y hace que el usuario sea más poderoso al aplicarlos en la práctica.

La administración de políticas y la gestión de reclamaciones son actividades en las que la gestión de documentos y las técnicas de automatización del flujo de trabajo se implementan principalmente. La gestión de relaciones con los clientes también requiere buenas técnicas de análisis y de inteligencia empresarial. En todas estas implementaciones y aplicaciones, encontramos que se requieren dos conjuntos de conocimientos a nivel de usuarios para hacer un mejor uso de ellos. El primer conjunto de conocimientos se refiere a las técnicas en sí y el segundo conjunto se refiere a las herramientas implementadas para aplicar las técnicas.

Por ejemplo, Business Intelligence (BI) es útil en casi todas las funciones de una organización de seguros. Para ello, la organización implementa algún software de Business Intelligence. Para hacer un uso efectivo de él, primero una persona necesita conocer varias técnicas de BI como clustering, reglas de asociación, etc. Un usuario no necesita conocer el algoritmo usado en estas técnicas, pero debe ser consciente del significado y uso de las mismas. Aprender las funciones disponibles en el software implementado para este propósito es relativamente fácil y se puede aprender fácilmente con el uso. Pero, si uno solo aprende el software y las características disponibles en ese y piensa que puede usar BI con ese conocimiento, entonces no funciona.

En las organizaciones de seguros, las implementaciones de proyectos de TI son actividades regulares. Las técnicas de gestión de proyectos como CPM / PERT (método de ruta crítica / técnicas de evaluación y revisión de programas) ayudan al equipo del proyecto a gestionar mejor el proyecto. Hay más historias de fallas en los proyectos de implementación de TI que historias de éxito. El personal de TI de la organización tiene que trabajar como interfaz entre los usuarios internos y los socios tecnológicos. El conocimiento de las técnicas de gestión de proyectos y la habilidad para interpretar datos para convertirlos en decisiones inteligentes juegan un papel importante en el éxito de los proyectos de TI.

En resumen, las necesidades de capacitación en TI para los profesionales de seguros se dividen en dos categorías: una relacionada con las técnicas y la otra relacionada con las herramientas implementadas para usar esas técnicas. Es necesaria la formación en técnicas de Business Intelligence, diseño de flujo de trabajo, técnicas de gestión de proyectos, técnicas de gestión de documentos y conocimientos, etc. Generalmente, se proporciona capacitación específica sobre la herramienta durante la implementación. Debería haber algún plan para capacitar a más personas en herramientas por parte de aquellos que ya están capacitados. Estas herramientas se pueden aprender mejor mediante el uso y la práctica. Sin embargo, estos pueden ser útiles solo cuando el usuario comprende las técnicas a un nivel viable.

Además de estos temas, todo el mundo debería estar plenamente consciente de los problemas de seguridad de la información y la política de TI de la organización. Con una capacitación diseñada adecuadamente basada en las consideraciones anteriores, una organización de seguros puede hacer un mejor uso de la tecnología de la información.