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Les principes fondamentaux de la Fédération des Scouts Baden-Powell de Belgique.
Traducción al español por Juan y Ana González. El vídeo original se encuentra en francés: https://www.youtube.com/watch?v=H2oUAJ4sloM
e inglés: https://www.youtube.com/watch?v=ab2TI6q8J-E
Todos los derechos reservados para Fédération des Scouts Baden-Powell de Belgique.

Será un niño, o una niña; será blanco, negro o amarillo, o un poco de todo a la vez; hablará inglés, o un dialecto que solo comprende una minoría. Su país podrá estar en guerra, en crisis, o tal vez no. Tendrá la oportunidad de ir a una escuela, o de ir a la escuela de la vida.
En todo caso, será al inicio pequeño, pequeño entre los grandes, un hombre pequeño que no comprenderá gran cosa del mundo. Hace ya 111 años un hombre se fijó en este pequeño ser que los grandes, demasiado grandes, no observaban. ¿Su nombre? Baden Powell. El pequeño hombre que tenía delante, ese ser que aún no entiende gran cosa de la vida dirigiría algún día al mundo.
Así Baden Powell decidió prepararlo y hacerle descubrir los valores necesario para crear un mundo mejor.
Él le dio un pañuelo para recordarle el deber de hacer siempre una buena acción diaria y de siempre velar por la paz. Levantar tres dedos y la promesa de respetar tres principios. Tener siempre un proyecto en la vida. Ser siempre leal y estar siempre para sus hermanos. Y de creer en algo más grande, sin importar cual sea su nombre. Porque creer, es sobre todo, creer que mañana puede ser mejor.
Luego le dio una insignia: una flor de lis con tres pétalos, rodeada por una cuerda, para que el no olvidé jamás sus tres deseos y recuerde jamás dejar atrás a sus hermanos.
No siendo eterno, le confió una misión: enseñar a los más pequeños que él, una vez que él sería más grande.
El escultismo nació. Hoy en día cuenta con más de 40 millones de miembros y es principalmente un proyecto para los seres humanos.
Queremos enseñar la autonomía y la libertad de pensamiento. Queremos enseñar a tener confianza en uno mismo, para ser sociables pase lo que pase, ser un compañero solidario, ser consciente y crítico, tener valores internos que abren algo más grande.
No, el escultismo no es sólo la recreación al aire libre. Es muchísimo más que eso. Es un movimiento de los jóvenes, y por los jóvenes basado en voluntarios, y abierto a todas las creencias.
Es un movimiento apolítico e independiente que se adapta a la sociedad de hoy a través de un método universal que comprende: la relación, la acción, la vida en pequeños grupos, la naturaleza, el descubrimiento, el simbolismo, y la ley y la promesa común para todos los scout del mundo.
Esta misión, estos valores y este método hacen del escultismo una experiencia única, un movimiento que prepara a los jóvenes para la vida adulta. Para desenvolverse en su primer trabajo, trabajar en equipo, para establecerse en un hogar equilibrado.
Durante más de un siglo, muchos hombres pequeños se hicieron grandes. En nuestro pais, y al otro lado del mundo, e incluso más allá.

Fuente YouTube