A menudo, mientras veo las experiencias de otros artistas con su creatividad, definidas por lápiz a papel dentro de sus “Declaraciones del artista”, me encuentro pensando: “Esto me recuerda al hombre tratando de definir a Dios poniendo la creatividad en una caja”. Oft veces también me pregunto, “¿De qué diablos están hablando? Me pregunto si incluso ‘ellos’ lo saben”.

He conocido a todo tipo de artistas. Siempre espero compartir algún tipo de fenómeno con otros artistas, de una vibración inconfundible que ambos generamos y alimentamos. Espero que nuestra conexión nos haga alcanzar nuevas alturas y sentirnos obligados a volver a casa y crear grandes cosas. Raramente encuentro artistas así, son tan diferentes entre sí como cualquiera.

Realmente creo que hay una ‘energía’ dentro del arte, los colores, y es esa energía sobre una obra de arte a la que las personas resuenan … o no. A algunos solo les gusta mi obra de arte precisa, de la cual siento que son representaciones y no en mi opinión personal, ‘verdadero arte’. Me dice que no estamos conectados en un sentido ‘espiritual’. Sin embargo, nos conectamos en otros niveles, por lo que las consecuencias de ese tipo de pensamiento no son algo que deba ser analizado, en el caso de que encuentre mi opinión ofensiva u objetable.

Creo que mucha ‘charla artística’ es mumbo jumbo, y es tan redundante y aburrida como el último jugador de fútbol que explica cómo su equipo va a ganar el próximo partido. Sin embargo, también creo que es necesario que el artista describa la conexión que sienten con su arte. Hacer eso ayuda al espectador a entrar en su mundo, así como al artista a comprender “qué diablos pasó” para hacer que creen lo que hicieron.

La creatividad es esquiva, pero cuanto más entramos en esa puerta, más nos encontramos en presencia de algo verdaderamente notable. Creo que la vibración de los colores, junto con el espíritu de la danza de la acción creativa, se puede encontrar en todo tipo de arte y nadie tiene mercado para eso. De vez en cuando nos encontramos con genios como Leonardo da Vinci y nos quedamos asombrados. Debido a las aventuras milagrosas del alma, en cualquier género, es nuestra responsabilidad perseguir lo desconocido. Leonardo da Vinci solo rascó la superficie. Perseguir las vibraciones de lo evasivo es a menudo una experiencia sola. Es dentro de esa “oración” que se descubren los místicos. Sin embargo, hay muchas formas de hacerlo, ya que hay religiones, así que no creo que nadie tenga la clave para todo.

Entonces, ¿cómo lo haces? ¿Cómo se escribe una “Declaración del artista” que tiene sentido? Primero defina quién es usted dentro de su trabajo en su propia mente. Si no lo sabe, no podrá escribir nada que otros comprendan. Tenga cuidado con el mumbo jumbo, pero escriba su corazón mientras mira su trabajo. Es posible que descubras una parte de ti que no habías conocido antes. Tómate tu tiempo, descubre quién eres. Recuerde también a Da Vinci, nada de lo que hizo se hizo sin una confrontación extrema de lo que estaba buscando explorar, por lo que la pereza no es aceptable. ¿Derecha? ¡Si!