Con la esperanza de obtener algo de su tiempo, millones de personas leen la Biblia cada año. Muchos parecen no aprovechar mucho su tiempo. Aprender a aprovechar al máximo su estudio bíblico requiere prepararse bien, leer bien durante y vivir bien después de leer las Escrituras.

Prepárate bien

Una buena preparación es vital para aprender a aprovechar al máximo su estudio bíblico. Elija un tiempo que pueda pasar sin influencias que lo distraigan. Por lo general, lo mejor es un horario que funcione de manera regular. Seleccione un lugar que esté adecuadamente iluminado, tenga muebles adecuados y aumente las posibilidades de que su tiempo sea lo más ininterrumpido posible.

Reúna las herramientas adecuadas para aprovechar bien su tiempo. Algunos medios para tomar notas tanto en su Biblia como en algún otro formato son muy útiles. Como mínimo, se debe utilizar un bolígrafo de punta fina y papel en blanco o tarjetas de notas. Tenga a mano un buen diccionario de inglés, así como obras de referencia bíblicas como una concordancia, un diccionario bíblico y un atlas.

Pase tiempo en oración antes de comenzar su tiempo en las Escrituras. Pídale a Dios que lo bendiga con la iluminación de Su Palabra. Considere cantar un himno de vez en cuando antes de abrir su Biblia. De vez en cuando, también revise sus notas recientes para ver patrones en lo que Dios le ha estado diciendo recientemente.

Lee bien

Para aprender a aprovechar al máximo su estudio bíblico, preste mucha atención a leer bien. Leer en voz alta puede ser una excelente ayuda para lograr una mayor comprensión. Lea atentamente y el tiempo suficiente para que Dios le hable.

Ore por comprensión mientras estudia. Ore por las cosas que Dios le muestra. Agradezca a Dios por revelarse a usted cuando lo hace. Al menos ocasionalmente, ore específicamente para que Dios mismo le muestre cómo aprovechar al máximo su estudio bíblico.

Utilice obras de referencia de la Biblia durante su lectura para aprovechar al máximo su tiempo. Consulte los diccionarios para conocer los significados de las palabras que no conoce y los atlas para obtener ayuda con las referencias geográficas.

Anota lo que Dios te muestra de tu estudio. Marque en su Biblia las ideas clave que vea, especialmente las referencias cruzadas que ayuden a abrir su comprensión de lo que está leyendo. Tome al menos notas breves para que pueda ensayar ideas importantes más adelante.

Piense profundamente en cómo se aplica a la vida lo que lee. Pídale a Dios que le ayude a saber qué quiere que haga con lo que ha leído.

Mantenga un registro de lo que lee para que pueda monitorear su progreso a través de la Biblia. Intente leer toda la Biblia año tras año.

Seleccione al menos de vez en cuando algo para memorizar de lo que lee. Pon ese material en una tarjeta de notas u otro recurso que se pueda consultar fácilmente durante el día.

Termine su tiempo en oración. Da gracias a Dios por lo que te ha dado.

Vivir bien

Después de terminar su tiempo en las Escrituras, planificar lo que hará con lo que ha leído es un elemento clave para aprender a aprovechar al máximo su estudio bíblico. Con demasiada frecuencia, se presta poca atención a este asunto vital de aplicar las Escrituras a su vida. Aparte de vivir bien como resultado de su lectura, no sacará provecho de su tiempo de la manera que Dios quiere.

Ensayar en diferentes momentos durante el día lo que leyó y memorizó anteriormente es muy útil. Una buena forma de hacerlo es compartir con otros las cosas que Dios le mostró ese día. Hablar con familiares y amigos sobre cómo piensa cambiar su forma de pensar y su forma de vida le ayudará a hacer lo que Dios le reveló ese día. Los momentos devocionales en familia y los estudios bíblicos en grupo son lugares excelentes para compartir y discutir sus ideas.

Hacerse responsable ante un compañero de oración por hacer lo que Dios quiere es otra buena manera de aprovechar al máximo su tiempo en las Escrituras. Organizar sus percepciones de las Escrituras de una manera que le permita acceder a ellas en tiempos futuros de leer los mismos pasajes le ayudará a preservar las percepciones que Dios le dio. El uso de herramientas de estudio electrónicas para organizar sus conocimientos es una excelente manera de aprender a aprovechar al máximo su estudio bíblico.

Al pensar detenidamente en cómo pasa su tiempo antes, durante y después de su tiempo en las Escrituras, ¡aprenderá cómo aprovechar al máximo su estudio bíblico!