Se supone que la Navidad es la época más feliz del año, cuando las personas están alegres y transmiten alegría a través de la participación activa. Sin embargo, es posible que la temporada navideña no sea alegre para todos. Muchas personas sienten una carga de dolor durante esta época del año. Y en la mayoría de los casos, el culpable no es una persona o sus circunstancias, sino los síntomas depresivos que se presentan en esta temporada.

Según los Institutos Nacionales de Salud (NIH), “La Navidad es la época del año en que las personas experimentan la mayor incidencia de depresión”. A medida que los casos de depresión son testigos de un aumento significativo durante la temporada festiva, hay un fuerte aumento en el número de intentos de suicidio por parte de personas en todo el país.

Depresión navideña provocada por múltiples factores

La tristeza navideña puede ser provocada por múltiples factores, como grandes pérdidas, fracasos en la vida, estrés y soledad. Sin embargo, estos factores pueden agravarse en esta época del año debido a diversas presiones, autoinducidas o sociales, dejando a las personas vulnerables a la depresión y otras afecciones de salud mental.

Además, quienes han experimentado la pérdida de un ser querido en la familia o han experimentado el dolor del divorcio son más propensos a la depresión, especialmente cuando reaparecen viejos recuerdos de días felices. Sin embargo, es posible que circunstancias como la pérdida personal, el fracaso o el trauma no siempre sean responsables de la depresión en ciertas personas. De hecho, hay algunas personas cuyos cerebros están programados para deprimirse durante la temporada festiva.

Puede ser extremadamente difícil lidiar con episodios depresivos, especialmente cuando todos a nuestro alrededor parecen estar llenos de alegría. Tal situación puede hacer que buscar ayuda sea aún más difícil e incómodo. En ocasiones, la tristeza navideña puede ser resultado directo de una excesiva comercialización de las festividades, que enfatizan la importancia de una forma “perfecta” de realizar las actividades sociales.

Curiosamente, algunas personas tienden a profundizar en la autorreflexión excesiva sobre las insuficiencias de la vida, especialmente durante diciembre, y terminan sintiéndose victimizadas.

Consejos para afrontar los sentimientos depresivos durante la época navideña

Buscando apoyo: En caso de depresión severa, la mejor opción es ponerse en contacto con un profesional de salud mental calificado.

Manejo de finanzas: Tiene sentido reservar un presupuesto para regalos, fiestas y eventos sociales durante la temporada festiva.

Centrándonos en la realidad: Es recomendable no dejarse llevar por lo que los medios de comunicación u otras instituciones quieren que el público crea como la perfecta celebración de fiestas. Mantener estándares razonables es la mejor manera de evitar problemas.

Haciendo algo de caridad: Contribuir de una manera no monetaria, como tomarse un tiempo para ayudar en una organización benéfica favorita y otras causas significativas, es una manera ideal de mantener a raya el blues festivo.

Mostrando gratitud: Estar agradecido con todos en la vida es una excelente manera de ser feliz, ya que hay muchos que son menos privilegiados y tienen muchas necesidades insatisfechas durante la temporada.

Participar en actividades de la iglesia: Si alguien es religioso, tomarse un tiempo para asistir a los servicios en la iglesia y participar en otras actividades que se centren en el significado real del festival puede ser de gran ayuda.

Haciendo algo de planificación: Planificar con anticipación para garantizar una temporada festiva llena de actividades físicas, salidas y tiempo al aire libre puede ayudar a combatir los cambios de humor.

Llevar una vida libre de depresión es posible

Es triste vivir con depresión, especialmente durante la temporada festiva, cuando todo el mundo está celebrando. La salud emocional es tan importante como la salud física.