El glaucoma es una de las enfermedades oculares más comunes, afecta a 1 de cada 200 personas menores de 50 años. Es mucho más común entre los ancianos: casi el 10% de todas las personas mayores de 80 sufren de glaucoma. El glaucoma es una enfermedad muy peligrosa, ya que puede provocar la pérdida de la vista si no se trata. Además, la detección de esta enfermedad ocular es bastante difícil ya que los síntomas se manifiestan solo en etapas más avanzadas.

En el glaucoma, el nervio óptico se daña, generalmente debido al aumento de la presión del humor acuoso, el líquido presente en el ojo. El daño al nervio óptico puede ser menor, pero con el tiempo, puede conducir a la ceguera completa.

Los síntomas del glaucoma

El glaucoma se puede clasificar efectivamente en dos tipos: de ángulo abierto y de ángulo cerrado.

El primero es más común y también más difícil de detectar. En el glaucoma de ángulo abierto, el paciente sufre una pérdida gradual de la vista que conduce a la ceguera completa si no se trata. El campo de visión disminuye gradualmente y hay cambios en el nervio óptico. Debido a la ausencia de cambios perceptibles en las primeras etapas, se hace difícil de detectar. Más del 90% de todos los casos de glaucoma en los Estados Unidos son de ángulo abierto, aunque esta cifra es mucho menor en los países asiáticos y europeos.

El glaucoma de ángulo cerrado es más raro. Sus síntomas también son mucho más agudos e incluyen dolor en los ojos, manchas, halos o luces, ojos extremadamente rojos y náuseas. La pérdida de visión puede ser muy repentina y extremadamente dolorosa. El glaucoma de ángulo cerrado debe tratarse de inmediato, ya que puede conducir rápidamente a la ceguera completa. Afecta a menos del 10% de las personas en los Estados Unidos.

Causas del glaucoma

La causa principal de esta enfermedad ocular, como se describió anteriormente, es el aumento de la presión sobre el nervio ocular por el líquido presente en los ojos (humor acuoso). Este aumento en la presión en sí mismo está influenciado por la genética. Por ejemplo, los asiáticos orientales tienen más probabilidades de sufrir glaucoma de ángulo cerrado que de ángulo abierto, mientras que aquellos con ascendencia africana tienen tres veces más probabilidades de sufrir glaucoma de ángulo abierto que sus contrapartes caucásicas.

Otras causas de glaucoma son diabetes, variaciones en la presión arterial, hipertensión y traumatismos. Esta enfermedad ocular también está relacionada con la edad y es mucho más frecuente entre los ancianos. Esto se debe a la genética, así como al aumento de los problemas de salud entre los ancianos, como la hipertensión, la diabetes, etc.

Curaciones de glaucoma

Hasta el momento no existe una cura permanente para el glaucoma, y ​​todas las curas solo pueden proporcionar un alivio temporal. En las primeras etapas, el glaucoma puede corregirse tomando medicamentos externos como gotas para los ojos. Estas gotas para los ojos ayudan a reducir la presión en los ojos.

En etapas posteriores, la cirugía puede ser efectiva para proporcionar alivio temporal. La cirugía puede llevarse a cabo mediante métodos convencionales o mediante láser. En la mayoría de los casos, tales operaciones no proporcionan curas duraderas.

El glaucoma es una enfermedad difícil de curar debido a sus orígenes genéticos. Sin embargo, se puede prevenir su aparición cuidando bien la salud, especialmente contra enfermedades como la diabetes y la hipertensión que tienen un papel que desempeñar en esta enfermedad ocular.